Los inversores son una combinación de optimismo prudente y fe ciega

Hace falta tener una personalidad especial para ser inversor, estar siempre en guardia para la próxima oportunidad a corto plazo que surja y, luego, una vez se ha reconocido un patrón familiar, con rapidez emprender la salida y llevar a cabo una estrategia planeada. “Vivir al límite” es una frase con la que ha fantaseado un inversor alguna vez para describir su vida. También debe tener fe ciega, pero esta viene de una de las piedras angulares del análisis técnico, que postula que las tendencias y los patrones se repiten en un mercado.

Los inversores son una estirpe rara, pero no tanto como crees. Mientras la comunidad de inversiones predica con estrategias de “compras a futuro” y promociona sus últimas ofertas al público, sus altamente cualificados inversores especulan en el departamento de operaciones para obtener beneficios rápidamente. La mentalidad de un inversor puede beneficiarse en cualquier tipo de mercado, al alza, a la baja, o lateral; cuanto más volátil, mejor, e incluso cuando un mercado está tranquilo, un inversor con experiencia sabe que las cosas cambiarán pronto.

¿Estás hecho para ser inversor? Una forma excelente de averiguarlo es analizando el mercado de divisas de alto riesgo. El mercado es inmenso, con inversiones las 24 horas del día, los siete días de la semana, y tiene mucha liquidez. La mayoría de los broker de forex proporcionan cuentas demo gratuitas que te permiten invertir dinero “virtual” con cotizaciones en tiempo real. Debes dedicarle cierto tiempo para prepararte y formarte antes de empezar a “practicar”, pero el proceso te enseñará a usar análisis fundamentales y técnicos para tu propio beneficio, algo que cualquier inversor debería aprender en algún momento de su vida. Si invertir no casa con tu personalidad, siempre tienes la inversión “en espejo” o las cuentas administradas por forex como alternativas.

Aprenderás que no es necesario ser un inversor a tiempo completo que intenta “revender” “pips” con cada movimiento que hace en el mercado y que realiza cien inversiones al día. “Inversiones fluctuantes” es el nombre que se utiliza para vender posiciones durante unos días, menos intenso y con más tiempo para pensar. Los otros principios básicos para operar son:

• Debes tener un plan de operaciones “paso a paso” que guíe el proceso de toma de decisiones antes, durante y después de cerrar una posición. La preparación es vital antes de que entres en el mercado, y deberás practicar tu rutina personal hasta que se convierta en rutina, la mejor manera de evitar que dudes cuando tengas presión;

• Debes estar listo para la acción, siempre buscando patrones que te den altas probabilidades de obtener beneficios, y luego actuar según tus observaciones. Debes establecer tus límites a la vez que haces los pedidos, y limitar la exposición del 2 o 3% de tu capital de inversión. Nunca tengas más de tres posiciones activas a la vez. Operar puede hacer que pierdas inversiones, a veces durante largos períodos, tanto que deberás poder sobrevivir en las épocas de sequía y después sacar tus caballos ganadores para sacarles partido. Resiste la tentación de “jugártelo todo por el todo”;

• Si la presión es demasiada, tómate un descanso. Usa este tiempo para analizar lo que has hecho y busca patrones de tu estilo de inversión que deban ser repetidos o corregidos;

• ¡Mantén la fe! Siempre hay nuevas oportunidades a la vuelta de la esquina. Las tendencias y los patrones se repiten, y tus herramientas técnicas te proporcionarán consistencia durante el largo recorrido.

Los inversores suelen tener vidas activas, y los que tienen éxito saben cómo seguir siendo optimistas cuando todo se vuelve negativo. Aprende de su ejemplo.